Por
Eugenia Garay Basualdo

Háblame (HBLM/TLKM) en Pabellón 4

En la entrevista realizada para Be Cult, Thornton comentó que cada uno filmó su performance de acuerdo a sus criterios e intereses. Ella en una cantera de Lombardía (Italia) y él en las montañas de La Rioja (Argentina). Luego, se enviaron los materiales en crudo y cada quien editó una video-performance distinta utilizando la filmaciones propias y la del compañero. Técnicamente la propuesta es muy atractiva: que cada uno tenga la libertad de hacer su propio final cut.

La obra cuenta con un complejo proceso y, sobre todo, varias intencionalidades. Por un lado, mostrar el despliegue técnico que cada artista se propuso llevar a cabo en zonas poco comunes e inhóspitas para filmar en exteriores. Por otro, mostrar dos ediciones de imagen y sonido que, además, cuenta con musicalizaciones diferentes, lo que le confiere a cada pieza un carácter particular muy vinculado con el estilo personal. Por último, escenificar el diálogo utópico entre los personajes Natan (Thornton) y Yoshi (Staehli) que no se conocen y no logran encontrarse porque transitan por espacios distintos y lejanos, pero en apariencia tratan de establecer contacto en un mismo marco de tiempo. Esa no reunión frente a frente de los personajes termina siendo un encuentro en la pantalla que solo puede presenciar y completar el espectador.

Para esta ocasión, Thornton sumó el desafío de la performance como disciplina a su trabajo artístico, y su Natan vistió un mameluco blanco, una máscara blanca con forma cónica y con líneas negras. Esta estética podría remitir, solo en lo visual, a los maquillajes y tocados que utilizaban los habitantes originarios de Tierra del Fuego y también al Ku Klux Klan (sin ningún contenido ideológico). Incorporó una extravagante tela de un fucsia brillante que produce un extrañamiento muy efectivo, y llevó a cabo una suerte de ritual con piedras que recogió en su andar por el desierto riojano.

El Yoshi de Nina Staehili tiene varios años de vida en otras performances. Ella lo representó vistiendo un mameluco blanco y una gran cabeza redonda y blanca con unos chorreados de tinta oscura que tiene orificios para los ojos y la boca, y orejas suavemente sugeridas, lo que le suma ternura a un personaje irreverente pero con cierta ternura siniestra. Efectuó su performance en el interior de un sitio cavernoso portando una pequeña caja de cartón blanco que cuidó como si fuera un juguete o un amuleto, sin certezas de para qué sirve. Si exploramos su web, encontraremos que Yoshi se emparenta con otras obras denominadas heads.

La muestra se completa con fotogramas impresos en papel que Thornton extrajo de su video performance. En esta selección aparece el tipo de intervención que ya es marca registrada en Thornton, y también el proceso que sigue el artista pasando de un soporte al otro. Se aprovecha la altura de la sala para sostener del techo dos grandes banderas de tela con supuestas iconografías que refieren al personaje Natan. Otros dibujos aparecen como raras traducciones del idioma indefinido que hablan estos personajes y que se asemejan pentagramas.

¿Por qué, una y otra vez, se produce un tipo de arte que deja preguntas sin respuestas? ¿Por qué se busca seguir manifestando ideas muchas veces encriptadas, ambiguas, o un tanto confusas para el espectador?

En este caso, creemos que la confluencia de estos artistas (y estos personajes) en un mismo tiempo que es HOY y que habitan en un mundo real (pero que parece de ciencia ficción) y que es la mayor parte del tiempo vertiginoso, inhumano, frívolo e insoportable, es lo interesante de toda esta historia. Los encuentros que nunca se producen pero han sido pactados y hasta ansiados, o aquellos fortuitos que se producen solo por instantes con personas con las que nos veremos una vez en la vida porque nos cruzamos por única vez. Natan y Yoshi no se conocen ni lo harán, pero tienen la percepción de que hay alguien del otro lado e intentan contactarse, dejar un rastro, marcar un signo. Tal vez esto sea lo que hace el arte.

 

Link a la publicación: https://revistabecult.com.ar/hablame-hblm-tlkm-en-pabellon-4/?fbclid=Iw…;